jueves, 18 de junio de 2009

3/4 partes de lo mismo...


La vida, en su esencia, siempre es igual. Muchos tienen objetivos que cumplir en su vida. Objetivos que les mueven a querer seguir viviendo para poder alcanzarlos y poder disfrutar de ellos.

Pero el problema viene cuando no tienes nada que te motive. Simplemente ves pasar el día a día sin tener nada especial por lo que luchar.

Así es como me encuentro ultimamente. Perdí mis objetivos hace mucho tiempo, mis aspiraciones han desaparecido por completo. Tengo miedo a que mi vida sea como la de los demás: conseguir un buen trabajo, una pareja y tener hijos... No nos engañemos, es lo que hace la mayoría de las personas.

Por ese motivo, creo que acabe en los vicios de los cuales estoy enganchada. Son maneras temporales de olvidar mi rumbo y que hacen que desaparezca este sentimiento.

Sexo, alcohol, productos aditivos... Son cosas que me dan felicidad, aunque en el fondo sepa que todo es mentira, pero que de alguna manera me hacen sentir bien.

No voy a decir que no soy feliz, porque estaría mintiendo. Me siento una persona bastante dichosa de tener lo que tengo, solo que me siento confundida.

Por eso, para poder alegrarme un poco, hablaremos de sexo.

Si te gusta la carne, y además también el pescado, ¿no debe molar tener los dos ingredientes en un mismo plato?

Pues si, voy ha hablar de los intersexuales, vulgarmente conocidos como hermafroditas, aquellos que tienen el órgano sexual masculino y femenino al mismo tiempo, de forma variable.

Estas personas, a pesar de haber nacido biologicamente diferentes a la mayoría, empiezan a tener serios problemas desde su llegada al mundo. La posible vergüenza y preocupación de sus padres hace que estos decidan ellos mismos el sexo del bebe. Como podréis ver, esto puede afectar psicológicamente mas adelante. ¿Que pasaría si después de elegir el sexo, el hijo se siente mas identificado con el otro genero?

Y no solo eso. Si los padres no se deciden y no operan al bebe, dejándole los dos órganos, también podrían aparecer problemas. La vergüenza o el rechazo de la sociedad.

Ver diferentes fotos de este genero es sorprendente y tan diferentes entre ellos, que son dignos de ver.

Podría parecer una tontería, pero siempre hay un tanto por ciento de que pueda pasarnos esto a nosotros mismos. Mínimo, pero la hay.